lunes, 25 de octubre de 2010
Circulo vicioso.
Tengo ganas de comer, todo el tiempo.
Recuerdo aquellas épocas en las cuales, la única comida que ingresaba a mi boca, era un turrón al mediodía y con suerte una porción de algo en la cena. Recuerdo cuando empecé a bajar de peso: ¡tan bien se sentía! Recuerdo cuando la anorexia era parte de mi vida y era feliz.
Hoy, me la paso pensando en comer, vivo llena de ansiedad. Como y siento culpa. ¿Sería una solución "saludable" comer y vomitar? Hace años que no lo hago, quiero volver a eso, pero no sé si mi cuerpo lo va a resistir. Ojalá no me pase más nada.
Ser flaca, ser linda, ser inteligente, ser exitosa. Qué mal, no vengo cumpliendo ninguna de mi metas.
No comer es un vicio, como fumar, pero a éste, no lo podes dejar. Vive dentro tuyo y siempre vuelve para recordarte que sos una marioneta que esta bajo su poder, y que cuando menos te lo esperes, va a volver y usarte, hasta sacar el último nutriente de tu ser, hasta sacar el último pigmento rosado de tus mejillas, hasta bajar tu ritmo cardíaco, hasta que no te puedas levantar y, sobre todo, hasta que se transforme en lo único necesario para vivir.
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no creo que sea la solucion , para canalizar tu ansiedad , deberias buscar alguna actividad , algo en que entretenerte en que pensar , sal con tus amigos , o haz nuevos , pero o te dejes sola a las manos d ela ansiedad y sus transtornos...
ResponderEliminarojo chica , piensa antes de actuar.
besos!
*Se recomienda hacerle caso al comentario de arriba*
ResponderEliminar¡"Saludabe"! ¿Cómo? ¿Cuándo? No, Flor, no es nada saludable, y sé que lo sabés muy bien...
Por favor, no te guíes por los estereotipos; ellos no tienen por qué robarte la calma, la sonrisa; ellos no se merecen tenerte como seguidora.
Pensá, reflexioná, miranos... ¿Cómo llegamos hasta acá? ¡Pensar que nos creíamos incapaces de dar una pizca de un paso sin volver a tropezarnos; pero, cuando los consejos y las palabras justas nos encontraban, éramos INVENCIBLES.
Yo no solté tu mano, ¿sabías? y nunca voy a soltarla. Sé que ni nos vemos y apenas hablamos, por eso te pido que no te olvides de las incontables mil quinientas cosas que pude haberte dicho en muchos momentos para que no elijas la bifurcación incorrecta del camino de tu -y nuestra- vida.
Espero que sea un hasta pronto u.u
¡Te amo, amiga más mejor!